Reflexión sobre This Mortal House
"El sentimiento estético proporcionado por el trabajo sin sentido no puede describirse exactamente porque varía con cada individuo que realiza el trabajo...
El trabajo sin sentido es potencialmente la experiencia artística más abstracta, concreta, individual, absurda, indeterminada, exactamente determinada, variada, importante que uno puede emprender en la actualidad."
Fragmento de "Trabajo sin sentido", Walter De Maria, marzo de 1960
El arte de la performance es un arte basado en el tiempo y es una forma de arte inmaterial. Debes estar en el espacio, en un día específico, a una hora específica. Debes entrar en tu propia construcción física y mental, frente al público, y luego la actuación ocurrirá. El público siempre es un elemento muy importante de la obra. No se trata solo de ser testigo, sino también de interactuar con su presencia y, en algunos casos, de participar directamente. Algunas actuaciones son de larga duración y se basan en la repetición.
“This Mortal House Building 1” se basa en la repetición, durante muchos días y muchas horas, lo que crea una experiencia hipnótica en el espacio. Al observar la obra, se pierde la sensación de un comienzo o un final, y el trabajo continúa indefinidamente.
Para comprender la actuación de Maria Stamenkovic Herranz, es importante estar físicamente presente y emocionalmente involucrado, observando y revisando la performance en diferentes momentos del día y de la semana.
El contacto entre la performer y el público se convierte en un asunto íntimo y único, incluso cuando la performer lleva los ojos vendados. Durante la ejecución y al atravesar el momento critico del cansancio y el agotamiento, el público desempeña un papel importante en el apoyo y el estímulo. Esto se convierte en una experiencia colectiva especial.
La actuación de larga duración tiene esta cualidad de transformación, no solo para el performer, sino también para el público que sigue todo el proceso.
Al mirar al pasado, a las tradiciones de diferentes culturas y religiones, el recuerdo más vívido en mi mente es un ejercicio de meditación especial tibetano llamado Tsa Tsa, que consta de dos partes. Cada parte requiere tres meses para ser completada.
1ra Parte
El ejercicio consta de pequeños moldes metálicos de la imagen de Buda y una gran aglomeración de arcilla. Se le pide al practicante que llene los moldes con arcilla. Después de completar la tarea, debe vaciar el molde y secar la pequeña imagen de Buda al sol. Esta actividad lleva 8 horas al día, de trabajo continuo y arduo, para crear 1,111,111 imágenes de Buda.
Cuando se completa esta tarea, el practicante se enorgullece de su logro y queda unido al resultado. El practicante comienza la segunda parte del ejercicio para liberarse del apego al resultado. Ahora, el practicante debe estar preparado para pasar a la segunda parte, que es diferente de la primera porque no ve el resultado, pero sigue realizando el mismo trabajo físico.
2da Parte
Utilizando el mismo molde, el practicante se sentará en la orilla de un río en movimiento, llenará el molde con agua y lo vaciará en el río. Esto también lleva 8 horas al día, sin resultados visibles. Hasta que completen 1,111,111 imágenes de Buda.
Volviendo a “This Mortal House: Building 1” de Maria Stamenkovic Herranz, después de haber derribado todas las paredes y enfrentarnos a montones de ladrillos, el público se queda con diferentes respuestas emocionales sobre la vida y la muerte, así como la fragilidad y la naturaleza temporal de la existencia humana.